Tabla de contenido:
- ¿Qué le pasa a tu físico después de dejar de fumar?
- 1. Los dientes parecen más blancos
- 2. La piel luce más saludable
- 3. Ojos más brillantes
- 4. El cabello luce más saludable
- 5. Acelerar la cicatrización de heridas
- 6. Te hace lucir más joven
Cada año, el número de fumadores en Indonesia sigue aumentando. Según el Director de Prevención y Control de Enfermedades No Transmisibles del Ministerio de Salud de la República de Indonesia, citado a través de republika.com, Se sabe que hasta 2015, el número de fumadores en Indonesia alcanza actualmente los 90 millones de personas. Incluso hoy, Indonesia ya ocupa el primer lugar en el mayor número de fumadores del mundo, seguida de Rusia en segundo lugar, luego China, Filipinas y Vietnam.
De hecho, todos sabemos que fumar no solo provoca cáncer de pulmón, enfisema, enfermedades cardiovasculares, también puede provocar cambios en la apariencia del organismo. Sin embargo, aunque fumar puede ser perjudicial para la salud y dañar la apariencia del cuerpo, fumar no es algo fácil de romper.
Si estos hechos no lo convencen de dejar de fumar, ¿qué pasa con el hecho de que fumar realmente puede hacer que se vea peor?
De hecho, dejar de fumar puede mejorar su apariencia para volverse más bella.
¿Qué le pasa a tu físico después de dejar de fumar?
Aquí hay seis cambios físicos que ocurren cuando deja de fumar:
1. Los dientes parecen más blancos
El contenido de tabaco, alquitrán y nicotina en los cigarrillos puede hacer que sus dientes se pongan amarillos. Dejar de fumar ciertamente puede mantener sus dientes alejados del tabaco, el alquitrán y la nicotina, y puede hacer que sus dientes se vean más blancos y tengan un aliento más fresco.
2. La piel luce más saludable
Los hábitos de fumar pueden empeorar su piel, como la aparición de arrugas, puntos negros y bolsas en los ojos. La aparición de bolsas en los ojos se debe a que las toxinas del humo del cigarrillo dañan los delicados tejidos alrededor de los ojos. Dejar de fumar puede mantener sus ojos alejados de las toxinas de los cigarrillos y puede hacer que su piel sea más saludable.
3. Ojos más brillantes
Los ojos de un fumador a menudo se ven rojos, secos y cansados debido a la exposición al humo del cigarrillo. Dejar de fumar ciertamente puede evitar que el humo del cigarrillo le cause irritación en los ojos, como ojos rojos o secos.
4. El cabello luce más saludable
Un estudio de la Universidad de Zúrich encontró un vínculo entre fumar y la aparición de canas. La decoloración o el daño del cabello se deben a que los productos químicos de los cigarrillos pueden dañar las células de los folículos pilosos y bloquear la entrada de oxígeno que necesita el cabello debido al estrechamiento de los vasos sanguíneos. Dejar de fumar ciertamente puede mejorar esta situación y hacer que su cabello sea más saludable que antes.
5. Acelerar la cicatrización de heridas
Los hábitos de fumar pueden evitar que las moléculas de hemoglobina transporten el oxígeno que necesita por todo el cuerpo. El estrechamiento de los vasos sanguíneos causado por fumar también puede dificultar que la hemoglobina y el oxígeno lleguen a los tejidos donde se necesitan. Como resultado, el proceso de cicatrización de heridas en los fumadores dura más.
Dejar de fumar puede mejorar la situación y acelerar el proceso de curación de la herida.
6. Te hace lucir más joven
Cuanto más tiempo fumes, más viejo te verás. Un estudio encontró que cada diez años, fumar hace que una persona sea 2,5 años mayor que su edad real.
Esto sucede porque fumar puede contraer los vasos sanguíneos en la capa más externa de la piel, por lo que puede dañar el flujo sanguíneo. De hecho, sin flujo sanguíneo, su piel no puede recibir el oxígeno y los nutrientes que necesita. Además, el contenido de tabaco en los cigarrillos puede dañar la elastina y el colágeno, lo que puede provocar un envejecimiento prematuro caracterizado por la aparición de arrugas en la cara.
Al esforzarse por dejar de fumar, su apariencia se verá más fresca y más joven debido al retorno a la condición de los vasos sanguíneos que pueden mejorar el flujo sanguíneo, los nutrientes y el oxígeno que necesita la piel para regenerarse y prevenir el envejecimiento prematuro.