Tabla de contenido:
- Definición
- ¿Qué es la bronquiolitis?
- ¿Qué tan común es esta condición?
- Signos y síntomas
- ¿Cuáles son los signos y síntomas de la bronquiolitis?
- ¿Cuándo debería consultar a un médico?
- Causa
- ¿Qué causa la bronquiolitis?
- Factores de riesgo
- ¿Qué aumenta mi riesgo de bronquiolitis?
- Tratamiento
- ¿Cómo se diagnostica esta condición?
- ¿Cuáles son las opciones de tratamiento para la bronquiolitis?
- Remedios caseros
- ¿Cuáles son algunos cambios en el estilo de vida o remedios caseros que se pueden usar para tratar la bronquiolitis?
Definición
¿Qué es la bronquiolitis?
La bronquiolitis es una infección pulmonar común. Esta condición causa inflamación y bloqueo de las pequeñas vías respiratorias (bronquiolos) en los pulmones. Esta condición ocurre a menudo en niños. Los casos de bronquiolitis casi siempre son causados por virus.
La bronquiolitis comienza con síntomas que se asemejan a un resfriado, pero luego progresa a tos, sibilancias y, a veces, dificultad para respirar. Los síntomas de la bronquiolitis pueden durar desde unos pocos días hasta varias semanas, incluso hasta un mes.
La mayoría de los niños mejoran con la atención domiciliaria. Mientras tanto, una pequeña proporción de otros requieren hospitalización.
Las complicaciones de la bronquiolitis grave pueden incluir:
- Labios o piel azulados (cianosis). La cianosis es causada por la falta de oxígeno.
- Pausa en la respiración (apnea). La apnea generalmente ocurre en bebés prematuros y bebés de 2 meses.
- Deshidración.
- Niveles bajos de oxígeno e insuficiencia respiratoria.
La bronquiolitis que no desaparece puede ser una causa de enfermedad pulmonar obstructiva aguda (EPOC). Cuando tiene EPOC, puede experimentar bronquiolitis junto con enfisema.
¿Qué tan común es esta condición?
Esta condición es muy común. Suele afectar a niños pequeños y bebés. La bronquiolitis se puede tratar reduciendo los factores de riesgo. Hable con su médico para obtener más información.
Signos y síntomas
¿Cuáles son los signos y síntomas de la bronquiolitis?
- Nariz que moquea
- Congestión nasal
- Tos
- Fiebre leve (no siempre es el caso)
- Respiración dificultosa
- Sonido de silbido
- Infección del oído (otitis media) en muchos bebés.
Puede haber signos y síntomas no mencionados anteriormente. Si le preocupa un síntoma en particular, consulte a su médico.
¿Cuándo debería consultar a un médico?
Citado de la Clínica Mayo, debe comunicarse con su médico si experimenta los siguientes síntomas:
- Mordaza
- Sibilancia audible
- Respiración muy rápida: más de 60 respiraciones por minuto (taquipnea) y superficial
- Dificultad para respirar: las costillas parecen succionarse hacia adentro cuando el bebé respira
- Lento y somnoliento
- Negarse a beber o respirar demasiado rápido para comer o beber
- Piel azulada, especialmente en labios y uñas (cianosis)
Esto es especialmente importante si su hijo tiene menos de 12 semanas de edad o tiene otros factores de riesgo de bronquiolitis, incluido el nacimiento prematuro o una afección cardíaca o pulmonar.
Causa
¿Qué causa la bronquiolitis?
La bronquiolitis generalmente ocurre cuando el virus infecta los bronquiolos, que son las vías respiratorias (ramas) más pequeñas de los pulmones. La infección hace que los bronquiolos se hinchen y se inflamen.
La mucosidad también se acumulará en estas vías respiratorias, lo que dificultará que el aire fluya libremente hacia los pulmones.
La mayoría de los casos de bronquiolitis son causados por virus sincitial respiratorio (RSV). El RSV es un virus común que infecta a casi todos los niños de 2 años. La bronquiolitis también puede ser causada por otros virus, incluidos los virus que causan la gripe o el resfriado.
El virus que causa la bronquiolitis se propaga fácilmente. Puede contraer el virus al babear en el aire si una persona infectada tose, estornuda o habla. También puede contraer el virus al tocar objetos compartidos, como cubiertos, toallas o juguetes, y luego tocarse los ojos, la nariz o la boca.
Factores de riesgo
¿Qué aumenta mi riesgo de bronquiolitis?
Existen muchos factores de riesgo para la bronquiolitis, a saber:
- Bebés menores de 3 meses
- Nacimiento prematuro
- Afecciones cardíacas o pulmonares
- Exposición al humo de segunda mano
- Nunca obtenga leche materna: los bebés amamantados tienen los beneficios inmunológicos de la madre
- Contacto con varios niños, como en una guardería
- Vivir en un entorno abarrotado
- Tiene un familiar que asiste a la escuela o de la guardería y lleva la infección al hogar.
Tratamiento
La información proporcionada no sustituye al consejo médico. Siempre consulte a su médico.
¿Cómo se diagnostica esta condición?
Los médicos suelen identificar los problemas observando a su hijo y escuchando los sonidos pulmonares con un estetoscopio. Si su hijo tiene riesgo de bronquiolitis grave, el médico puede ordenar pruebas, como:
- Radiografía de pecho. El médico puede ordenar una radiografía de tórax para ver signos de neumonía.
- Pruebas virales. El médico puede tomar una muestra del moco de su hijo para analizar el virus que causa la bronquiolitis. Esto se hace usando bastoncillo de algodón que se inserta lentamente en la nariz.
- Prueba de sangre. A veces, se puede usar un análisis de sangre para verificar el recuento de glóbulos blancos. Los análisis de sangre también pueden determinar si los niveles de oxígeno han disminuido en el torrente sanguíneo del niño.
El médico también puede preguntarle sobre los signos de deshidratación, especialmente si su hijo se niega a comer o beber con frecuencia, o si está vomitando. Los signos de deshidratación incluyen ojos hundidos, boca y piel secas, letargo, orinar poco o nada.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento para la bronquiolitis?
Por lo general, solo se necesita tratamiento en el hogar para los síntomas de la bronquiolitis. Dele a su hijo muchos líquidos para evitar la deshidratación.
Si su bebé tiene la nariz tapada, úselo bulbo de succión para deshacerse de la mucosidad. Los medicamentos para el resfriado (como el acetaminofén o el ibuprofeno) pueden ayudar a reducir las molestias causadas por la fiebre.
No le dé aspirina a personas menores de 20 años debido al riesgo de síndrome de Reye. No se recomiendan los medicamentos para la tos y el resfriado de venta libre. Es una buena idea consultar a un médico.
Su médico puede recomendarle medicamentos broncodilatadores si su hijo muestra una tendencia a las reacciones alérgicas (atopia). En casos graves, es posible que su hijo deba ser hospitalizado o recibir oxígeno suplementario.
Remedios caseros
¿Cuáles son algunos cambios en el estilo de vida o remedios caseros que se pueden usar para tratar la bronquiolitis?
Aquí hay remedios caseros y de estilo de vida que pueden ayudarlo a lidiar con la bronquiolitis:
- Humedece el aire. Si el aire de la habitación del niño está seco, humidificador o un vaporizador puede ayudar a humedecer el aire. Este método puede ayudar a aliviar la congestión y la tos. Asegúrate de mantenerlo limpio. humidificador para prevenir el crecimiento de bacterias y hongos.
- Mantenga a su hijo erguido. Estar en posición erguida generalmente mejora la respiración.
- Dame un trago. Para prevenir la deshidratación, dele a su hijo muchos líquidos para beber, como agua o jugo.
- Pruebe las gotas nasales de solución salina para aliviar la congestión. Puedes comprarlos en la farmacia.
- Dar analgésicos. Los analgésicos como el acetaminofén (paracetamol) pueden aliviar el dolor de garganta y aumentar la capacidad del niño para beber líquidos. No le dé aspirina a su hijo. No administre medicamentos para la tos y el resfriado de venta libre a niños menores de 2 años.
- Evite el humo. El humo puede empeorar los síntomas de una infección respiratoria.
- Lavarse las manos con frecuencia para prevenir la propagación de enfermedades.
- Evitar el contacto con otros niños que tienen bronquiolitis o infecciones de las vías respiratorias superiores.
No hay ninguna vacuna disponible para prevenir las causas de la bronquiolitis (VSR y rinovirus). Sin embargo, puede tomar medidas preventivas aplicando la vacuna anual contra la influenza en niños mayores de 6 meses.
Si tiene alguna pregunta, consulte a su médico para encontrar la mejor solución a su problema.