Tabla de contenido:
- ¿Qué causa el dolor de espalda al respirar?
- 1. Lesión
- 2. Infección pulmonar
- 3. Embolia pulmonar
- 4. Obesidad
- Cómo lidiar con el dolor de espalda al respirar
- 1. Viva un estilo de vida saludable
- 2. No cargues tu espalda
- 3. Deja de fumar
El dolor de espalda es una de las afecciones más comunes. La Asociación Americana de Quiropráctica afirma que las mujeres experimentan más dolor de espalda que los hombres. El dolor de espalda generalmente se concentra en el área alrededor de la columna, lo que dificulta el movimiento de la parte superior del cuerpo. Pero en algunos casos, muchas personas también se quejan de dolor de espalda al respirar. ¿Qué lo causó? Consulte las reseñas de este artículo.
¿Qué causa el dolor de espalda al respirar?
Las siguientes son las diversas causas de dolor de espalda al respirar, las más comunes, a saber:
1. Lesión
La lesión de las costillas torácicas por esguinces, fracturas o golpear un objeto duro puede causar dolor de espalda al respirar. Las quejas de dolor también pueden ser causadas por lesiones en los músculos, ligamentos y estructuras que sostienen la columna. Una forma anormal de la columna, como en la escoliosis, la lordosis o la cifosis, también puede causar dolor de espalda al inhalar.
2. Infección pulmonar
Las infecciones pulmonares pueden dificultarle la respiración. Por ejemplo, si tiene neumonía, que puede provocarle una sensación de falta de aire y fiebre. Cuanto más duren los síntomas, más a menudo experimentará dolor con cada respiración.
3. Embolia pulmonar
La embolia pulmonar es una afección que ocurre cuando un coágulo de sangre bloquea un vaso sanguíneo en los pulmones. En la mayoría de los casos, la embolia pulmonar es causada por un coágulo de sangre que fluye hacia los pulmones desde las piernas, o podría provenir de otras partes del cuerpo como la pelvis, los brazos o el corazón (trombosis venosa profunda). Esta condición puede hacer que sienta dolor cada vez que respira.
4. Obesidad
El dolor de espalda al respirar también lo experimentan las personas con sobrepeso u obesidad. El sobrepeso puede ejercer una presión tremenda sobre la columna y bloquear las vías respiratorias, lo que a su vez puede provocarle falta de aire.
Si aún no está seguro de las causas que le duelen la espalda al respirar, es una buena idea consultar a un médico de inmediato para que pueda obtener el diagnóstico y el tratamiento correctos.
Cómo lidiar con el dolor de espalda al respirar
Los siguientes métodos le ayudarán a reducir o aliviar el dolor de espalda cuando respira, lo que le facilitará moverse y realizar sus actividades nuevamente.
1. Viva un estilo de vida saludable
Asegúrese de llevar una dieta equilibrada. Esto es importante para que no se vuelva obeso, lo que puede hacer que le duela la espalda. No olvide que también debe realizar actividad física. El ejercicio físico aeróbico regular puede aumentar la capacidad de su corazón y pulmones para que no sude fácilmente.
Consulte primero con su médico sobre el ejercicio físico adecuado para su afección. No dejes que el ejercicio físico que realizas agrave tu condición.
2. No cargues tu espalda
Evitar actividades extenuantes que ejerzan presión sobre la espalda es una buena elección para tratar la espalda mientras respira. Por lo tanto, asegúrese de no forzar el levantamiento o transportar objetos pesados sin ayuda. Siempre que sea posible, es mejor empujar que tirar o cargar objetos pesados. Si tiene que recoger un objeto que se ha caído, agáchese para recogerlo.
3. Deja de fumar
La mayoría de las personas no se dan cuenta de que fumar puede causar dolor de espalda al respirar. La razón es que fumar estrecha los vasos sanguíneos, lo que reduce la ingesta de oxígeno y nutrientes a los huesos. Como resultado, los fumadores experimentarán más fácilmente dolor de espalda o dolor. Por eso, deje de fumar ahora mismo si desea evitar que el dolor de espalda vuelva a aparecer.
La buena noticia es que la mayoría de los casos de dolor de espalda pueden desaparecer con descanso, fisioterapia y actividades físicas sencillas en casa. Sin embargo, si sus quejas no mejoran o empeoran, consulte a un médico de inmediato para que pueda recibir el tratamiento adecuado.