Tabla de contenido:
- La frecuencia de actividad física que necesitan los niños y adolescentes.
- Riesgo de falta de actividad física
- 1. Obesidad
- 2. Diabetes tipo 2
- 3. Crecimiento óseo atrofiado
- 4. Trastornos de depresión y ansiedad
- Consejos para aumentar la actividad física de niños y adolescentes
- 1. Sea un modelo a seguir para los niños
- 2. Planifica un fin de semana lleno de actividad
- 3. Elegir una actividad física que le guste al niño
- 4. Proporcionar herramientas o instalaciones para apoyar la actividad física.
A diferencia de cuando eras niño, las generaciones actuales de niños y adolescentes están más cerca de la tecnología. Esto es ciertamente bueno porque la tecnología abre el acceso al conocimiento y la creatividad. Sin embargo, existen efectos secundarios de los desarrollos tecnológicos que acechan a sus hijos e hijas. Los niños y adolescentes prefieren pasar tiempo frente a las pantallas. artilugio en lugar de tener que moverse para hacer algo.
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Si de niño siempre jugabas a jugar o al escondite con los amigos por las tardes, hoy en día los niños y adolescentes están ocupados persiguiendo la cantidad de seguidores (seguidores) en las redes sociales o en el juego videojuegos en casa. Esto muestra que la intensidad de la actividad física de niños y adolescentes ha disminuido considerablemente. De hecho, los niños y adolescentes deben cubrir las necesidades de determinadas actividades físicas todos los días.
La frecuencia de actividad física que necesitan los niños y adolescentes.
Lo que se entiende por actividad física es una actividad que requiere energía para mover el cuerpo y los músculos esqueléticos. La actividad física no es lo mismo que hacer ejercicio. El deporte es una actividad planificada, estructurada y repetitiva con un objetivo específico, es decir, entrenar determinados aspectos del fitness. Mientras tanto, la actividad física puede ser cualquier actividad como caminar, jugar o ayudar a los padres a limpiar la casa. Según lo recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS), los niños y adolescentes de 5 a 17 años necesitan la siguiente actividad física.
- Al menos 60 minutos de actividad física moderada a moderadamente vigorosa cada día.
- La actividad física durante más de 60 minutos puede proporcionar beneficios adicionales para la salud.
- Realizar actividad física que implique el fortalecimiento de huesos y músculos al menos 3 veces por semana.
Riesgo de falta de actividad física
Moverse y realizar actividad física es sin duda beneficioso para el desarrollo físico y psicológico de los niños. Además de un cuerpo en forma y una mente fresca, los niños también pueden practicar diversas habilidades útiles en sus vidas, como socializar, disciplinar y tener confianza en sí mismos. Sin embargo, si la actividad física de su hijo no es suficiente, debe conocer los siguientes riesgos posibles.
1. Obesidad
Tanto los niños como los adultos pueden ser obesos. La obesidad ocurre cuando consume demasiadas calorías pero no quema suficientes calorías para obtener energía. Además, demasiada grasa en el cuerpo también puede provocar obesidad o sobrepeso. Con la actividad física, su hijo puede reducir el riesgo de obesidad tanto cuando sea niño como cuando sea mayor. La razón es que las investigaciones han demostrado que las personas que son obesas cuando son niños tienden a experimentar las mismas condiciones cuando crecen.
2. Diabetes tipo 2
La falta de movimiento y actividad física puede aumentar el riesgo de un niño de diabetes tipo 2 (diabetes), especialmente si hay antecedentes familiares de la enfermedad. Con la actividad física, las células musculares se volverán más sensibles a la insulina, lo que ayuda a controlar los niveles de azúcar en el cuerpo. Además, la actividad física también puede equilibrar los niveles de glucosa en sangre.
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3. Crecimiento óseo atrofiado
La actividad física puede estimular el crecimiento y la formación de huesos, especialmente en la juventud. Entre los 9 y los 12 años, su hijo se encuentra en una edad dorada para el crecimiento óseo. Si durante estos momentos la actividad física del niño es muy limitada, el niño perderá la oportunidad de aumentar la masa y densidad ósea. Como resultado, el crecimiento óseo del niño no es óptimo. Tenga cuidado, los trastornos del crecimiento óseo en la juventud tienen el riesgo de causar osteoporosis en el futuro.
4. Trastornos de depresión y ansiedad
La actividad física para niños y adolescentes puede prevenir la depresión o los trastornos de ansiedad. Al moverse y realizar actividades, el cuerpo liberará varias hormonas y señales que pueden causar placer y reducir la percepción del dolor en el cerebro. La actividad física de rutina familiarizará la mente con la actitud positiva y la calma. Entonces, si sus hijos e hijas no se mueven lo suficiente, serán más propensos a desarrollar depresión y trastornos de ansiedad.
Consejos para aumentar la actividad física de niños y adolescentes
Aunque es importante, los niños y adolescentes a menudo pasan por alto la actividad física. Muchos también piensan erróneamente que la Educación Física o los deportes en la escuela son suficientes para satisfacer las necesidades de actividad física de los niños. Para fomentar la actividad física de niños y adolescentes, los padres pueden probar las siguientes formas inteligentes.
1. Sea un modelo a seguir para los niños
Los niños no se acostumbrarán a las actividades físicas si no les da ejemplos usted mismo. Por lo tanto, conviértase en un hábito de moverse más que de ser activo pasivamente. Por ejemplo, lavar su propio vehículo en lugar de pedir ayuda a un asistente doméstico o llevar un vehículo a un lavado de autos y motocicletas, limpiar la casa, hacer ejercicio con regularidad o caminar a una tienda cerca de su casa. Los niños también aprenderán que mantenerse activos es muy importante.
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2. Planifica un fin de semana lleno de actividad
Si usted y su pareja están ocupados toda la semana, planifique un fin de semana activo con su familia. En lugar de pasar siempre el fin de semana viendo películas o relajándose en casa, anime a sus hijos a moverse, por ejemplo, nadando, en bicicleta o yendo al zoológico. Si los niños sienten la emoción de moverse, estarán más motivados para hacer actividad física todos los días. Además, los niños sentirán la actividad física como algo positivo porque se realiza junto con sus familias.
3. Elegir una actividad física que le guste al niño
Para que el niño no sea holgazán ni se excusa cuando se le invita a moverse, elija lo que le guste a su hijo. Hay niños a los que no les gustan los deportes competitivos como el bádminton o el baloncesto. La razón es que los niños se sienten presionados a ganar. Busque otras alternativas para que los niños puedan mantenerse activos pero no demasiado competitivos, por ejemplo, bailar o cocinar.
4. Proporcionar herramientas o instalaciones para apoyar la actividad física.
Anime al niño a realizar actividad física proporcionándole juguetes y herramientas que requieran que se mueva, como una bicicleta, una pelota o una cuerda. salto a la comba. Al mismo tiempo, intente establecer un límite de tiempo para su uso artilugio u otros dispositivos electrónicos como televisores y computadoras que provocan que los niños sean pasivos. Su hijo también será entrenado para equilibrar las actividades activas y pasivas todos los días.
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